El objetivo principal de un slogan es vender, dando a conocer los mejores y más llamativos aspectos de un producto como su calidad, su tamaño, su sabor y beneficios, demostrando que es la mejor opción para el consumidor.
¿Qué es un slogan?
Un slogan es una frase que engloba todas las características positivas y llamativas de una marca o producto, complementando una imagen, video, nombre y logo de una empresa o mercancía. Según expertos, un slogan debe ser muy breve, pero a su vez, debe dar a entender todo un concepto de manera concisa, distintiva, innovadora y única.
Decir que el origen etimológico de la palabra slogan quiere decir “grito de guerra” podría ser considerado vox populi o lugar común, pero saber cómo elegirlo o de qué depende que sea exactamente el grito de guerra de una marca sigue siendo el resultado de una mente creativa o de horas y horas de discusión, ajustes y hasta momentos de inspiración, que sin lugar a dudas no todos logran a los mismos niveles.
Cómo hacer un slogan
- Haz brainstorming: Haz una lista de palabras clave de tu empresa, marca o producto, las cuales describan la visión de tu empresa o producto, qué servicios ofrecen y cómo se ve la compañía desde dentro. Después, haz también una lista con las características que te gustaría que los clientes relacionen con tu marca.
- Prioriza: toma esas listas y elije cinco palabras que consideres que son las más adecuadas para describir tu negocio y campaña. Estas palabras serán las que conformen el slogan.
- Integra: Con imágenes alusivas a tu empresa y su logotipo, comienza a hacer pruebas con las palabras y frases que llegues a definir. Debes revisar que esto se adapte como un conjunto.
- ¿Qué es lo que hace única a tu empresa o producto?: procura que el slogan realmente refleje la característica principal que hace que tu producto sea único y especial. Por ejemplo, si se trata una firma de servicio al cliente, ¿se destaca por su rapidez o por su calidad?
- Haz un slogan memorable: con las cinco palabras elegidas anteriormente, trata de crear una frase que se recuerde fácilmente y que condense la esencia de tu marca.
- Revisa y retoca el slogan si es necesario: una vez que ya tengas el slogan, tómate tu tiempo y responde las siguientes preguntas: ¿es memorable?, ¿se adapta al eslogan al nombre y logotipo de la compañía?, ¿hace una proposición única de venta?. Si la respuesta alguna de estas cuestiones es “No”, es momento de hacer los cambios necesarios hasta lograrlo.
Así como el ser humano evoluciona y las generaciones cambian de gustos y preferencias, la publicidad también debe adaptarse al entorno actual. Muy probablemente, la mayoría de las campañas publicitarias que salieron hace varios años ya no sean aplicables en la actualidad ya que las personas pensamos distinto, tenemos otras cosas en mente y nuestras prioridades han cambiado junto con nuestro entorno.
Recientemente hemos visto un incremento en la humanidad y transparencia de las campañas publicitarias. Las personas ya están acostumbradas a pensar que un anuncio es precisamente eso, y suelen no confiar tan rápido en una marca o panorámico. Hoy más que nunca es sumamente importante no solamente lanzar una campaña publicitaria, sino también, crear una comunidad alrededor de ella con la que las personas puedan sentirse incluidos e identificados.